Después de que durante cerca de cien años los bienes comunales se consideren patrimoniales, la ley de bases del régimen local de 1985 los ha calificado como dominio público. Las consecuencias del cambio legislativo son analizadas en el presente volumen, donde especialmente se estudian cuestiones como las siguientes: quién es el propietario de los comunales después de la ley de 1985 y quién tiene derecho a beneficiarse de tales patrimonios; la trascendencia de la nueva naturaleza en su régimen jurídico, así como su justificación; las modalidades de aprovechamiento vecinales y cánones que pueden exigirse; así como otros temas de indudable importancia para la resolución de problemas cotidianos sobre bienes comunales.