En esta obra, Florence Guignard explora, sugiere y encuentra múltiples objetos de conocimiento en sus raíces infantiles, el título nos sugiere un posible viaje hacia esos países oscuros de nuestra infancia, plenos de fantasías y significaciones que hemos dado a nuestras vivencias, es un regreso hacia ese "principio" desde donde emergen toda una serie de procesos psíquicos, un inicio de lo que más tarde se convertiría en angustia, sufrimiento, dolor psíquico, allí donde reside el núcleo, no solamente de nuestra sexualidad infantil, sino de nuestra identidad.